Ibercaja está anunciando el cierre de las denominadas ‘ventanillas desplazadas’, puntos donde la entidad atendía a vecinos del medio rural uno o dos días a la semana. En los próximos días dejarán de prestar atención en Peñaranda de Duero, además de otros cuatro pueblos: las sucursales de Los Balbases, Arauzo de Miel, Hontoria del Pinar y Canicosa de la Sierra.
En muchas de estas localidades ya han iniciado recogidas de firmas para evitar el cierre. La inmensa mayoría de sus usuarios son personas mayores, que desconocen por completo la operativa y el manejo de internet para gestionar las cuentas online. Además, se cerraría la puerta a poder sacar e ingresar dinero, teniendo que desplazarse hasta otros municipios cercanos -o llegando incluso a la capital de la Ribera-.
Cada vez más, el medio rural se va quedando sin servicios mientras a muchos, se les llena la boca de "luchar por la España Vaciada". La Comunida Autónoma más afectada es Castilla y León.
Curiosamente, IBERCAJA lanzó una campaña con el lema "EL BANCO DEL VAMOS" cuando deberían haber sido más honestos y haber puesto "EL BANCO DEL NOS VAMOS Y AHÍ OS QUEDÁIS"
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