Nos quieren acostumbrar a que las cosas no se pueden hacer bien, a qué el error es siempre el resultado del trabajo diario y no se dan cuenta que nosotros vinimos a cambiar las cosas, tanto el resultado como las formas de hacerlas.
Estos días se ha dado por terminada la obra de reparación del suministro de agua. Avería que ha dejado abierta la acera de la calle del río, en el lado de los números pares durante varias semanas. Pues bien, una vez concluida resulta que el final de obra es, cuanto menos, cuestionable por no decir una verdadera chapuza que ha indignado a muchos de l@s vecino@s y turistas que han venido a Peñaranda estos días. La calle del río forma parte del casco histórico de Peñaranda de Duero y de la misma forma que l@s vecin@s estamos obligados a cumplir unas normas específicas para ese tipo de espacio protegido, el Ayuntamiento no puede ser menos que los vecinos y vecinas y por lo tanto también tiene que realizar unas tareas de mantenimiento y arreglo de nuestro patrimonio acordé a la protección que tenga la zona de actuación.
Llenar de parches la acera después de varios días de tenerla abierta, sin nadie trabajando, sin barrer los restos de escombro y de tierra acumulados en la cuneta y terminar por enviar a dos operarios a cubrir una superficie de hormigón que necesitaba, cuanto menos, de un mayor número de personas trabajando allí, según nos indican trabajadores de la construcción, es una forma de acabar mal lo que mal comenzó.
Lo peor es que ante las críticas recibidas, como en ocasiones anteriores, se vuelven a enrocar y tras visitar la obra, mantienen que a ellos la obra le parece muy bien. Pues siguen equivocados. La obra es una chapuza, el Ayuntamiento tiene la obligación de que, si abre una calle, debe dejarla impecable. No siempre es posible, económicamente, usar de adoquinado para disponer de un acabado apropiado pero si es cierto que, si se va a hacer de hormigón, éste debe quedar completamente extendido por toda la acera y no en forma de pequeños baches o de trinchera con un acabado que puede hacer tropezar a las personas más mayores que viven en nuestro pueblo.
Por todo ello vamos a solicitar el informe de la arquitecta municipal y que se valore en Patrimonio de la Junta el resultado. Sería incomprensible que cualquiera de ambas figuras, siendo garantes del cuidado del patrimonio, pudieran dar el visto bueno a esa finalización de obra, maxime cuando se ha forzado la petición de informes para otr@s ciudadan@s sobre algunas intervenciones que se iban a hacer en nuestro municipio.
Ante este estado de cosas, creemos que la zona debe quedar totalmente adaptada a la protección establecido para el casco histórico y en esa línea vamos a presentar una pregunta mediante SEDE ELECTRÓNICA, en la que instamos a Patrimonio a contestar si el resultado de esta obra se ajusta se ajusta a la protección que tiene la calle del río como parte del casco histórico. También queremos un informe POR ESCRITO de la arquitecta municipal para saber si avala con las Normas Subsidiarias de Urbanismo la obra tal cual ha quedado. En caso de no ser suficiente, presentaremos una moción buscando el apoyo del Pleno.
Si finalmente estos informes son positivos para el ayuntamiento, creemos que deberíamos modificar esa parte de nuestro pueblo y en vez de casco histórico, declararlo zona de guerra. De esa forma los visitantes y los que queremos ver una Peñaranda arreglada, limpia y en condiciones, podrán hacer otro tipo de turismo: el turismo bélico en el cual las vías están llenas de socavones, trincheras y escombros.
Curiosamente, la parte mejor acabada de la obra ha sido la rectificada por uno de los vecinos de la calle que cuando el hormigón estaba todavía fresco, ha salido con las herramientas necesarias para arreglar el desaguisado.
Aquí tenemos disponibles algunas de las imágenes que no han hecho llegar hoy domingo: